S. salar se clasifica como una especie iterópara, es decir, puede generar varios desoves durante su vida, a diferencia de la mayoría de los salmones del Pacífico los cuales son semélparos y mueren después de solo un desove (Schaffer, 1974). Las hembras desovan entre octubre y noviembre en su rango de distribución natural, esto ocurre en arroyos de agua dulce donde seleccionan un sitio en donde la grava (10 cm a 30 cm) y la profundidad del agua (0,5 m a 30 m) son los adecuados (Balon, 1990). En este lugar, excava un surco realizando moviendo ascendentes y descendentes con su cuerpo, sin tocar las piedras (Drummond, 1982). Las hembras sueltan entre 8.000 a 25.000 huevos durante el periodo de desove. Los huevos fertilizados quedan en los nidos de desove y son cubiertos con grava por el macho. El periodo de desove tiene una duración de 1 a 2 semanas. La mayoría de los machos muere después del desove, mientras que el 10-40% de las hembras puede sobrevivir y volver al mar en otoño o pasar el invierno en los ríos, alimentarse durante verano, y migrar de nuevo (Behnke, 2010). Los huevos eclosionan después de 250 dias aproximadamente, en primavera. Los alevines eclosionados viven de sus reservas vitelinas por aproximadamente 300 días, escondiéndose en las corrientes entre la grava y rocas, hasta que comienzan a alimentarse como larvas y comiencen su migración al mar (Behnke, 2010; Klemetsen et al 2009). |