Morfológicamente es similar a otros Arctocephalus, en este caso es importante ver la forma del hocico (más redondeado) y la coloración plateada con tonalidades más claras en el vientre y cuello. 

Cráneo estrecho con superficie ventral convexa a nivel de las órbitas. Postcaninos superiores de tamaño similar (Yáñez  et al. 2009).

Puesto que no se observan hembras durante el invierno, se cree que migran, pero no hay información hacia dónde lo hacen, probablemente al Norte (Jefferson et al. 1993, Goldsworthy 2008). Los machos permanecen cerca de las colonias durante el invierno (Goldsworthy 2008) y se pueden observar durante todo el año en roqueríos junto a los subadultos (Jefferson et al. 1993). Durante el periodo de lactancia, las hembras realizan viajes al mar que varían entre 3 y 7 días dependiendo de la colonia en la que se encuentran, al igual que las distancias que viajan durante estos viajes (Lea et al. 2002). Luego del destete, las hembras adultas y los cachorros abandonan las colonias y no regresan a la costa hasta la próxima temporada. En términos generales, las hembras permanecen entre el 65-80% de su vida en el Mar y 20-35% en fuera del agua (Goldsworthy 2008).

Los machos comienzan a conquistar territorio en noviembre, formando harems de 5 -15 hembras. Ayunan hasta que las hembras se han apareado. Éstas llegan a la colonia un día antes de parir, donde paren una sola cría que pesa entre 6-7 Kg y mide 60-70 cm de longitud (Jefferson et al. 1993, Goldsworthy 2008), pocos días después entran en celo y se aparean cerca de 7 días después. Ocasionalmente se registran nacimientos de mellizos (Hoffman & Forcada 2009, Bonin et al. 2012). Los nacimientos ocurren en un periodo de 4 semanas con un pick cercano a mediados de diciembre. Las hembras permanecen con las crías alrededor de 7-10 días antes de iniciar los viajes tróficos, y alternan estadías en la costa amamantando con viajes en busca de alimento, hasta que las crías cumplen 4 meses de edad aproximadamente (Goldsworthy 2008).

Existe reproducción en territorio antártico reclamado por Chile (Cabo Shirreff). No existe colonia reproductiva en Chile continental e insular.

Se alimenta de peces linterna, krill, calamares y a veces pingüinos. La dieta varía de acuerdo a la temporada y a la colonia a la cual pertenezca el individuo (Ciaputa & Sicinski 2006). En Isla Macquarie se alimentan preferentemente de myctophidos, buceando entre los 10-20 m en las noches hasta los 100 m en las horas crepusculares (Goldsworthy 2008), mientras en Isla Heard se alimentan de peces notothenidos y myctophidos (Robinson et al. 2002). En Georgias del Sur e Isla Bouvet en cambio, la presa principal es el krill antártico (Goldsworthy 2008), existiendo registros de predación sobre pingüinos (Hofmeyr & Bester 1993). Para las Islas Shetland del Sur se indica que, de acuerdo al área o temporada de estudio, las principales presas del lobo fino antártico son el krill antártico (Euphasia superba), peces y/o pingüinos (Casaux et al. 2003; Osman et al. 2004). Daneri et al. (1999) agrega además el consumo de cefalópodos en periodos en donde el krill escasea, principalmente desde el verano al otoño tardío, estudiando contenidos estomacales de machos no reproductivos, principalmente juveniles y unos pocos sub-adultos.

Diversos ambientes costeros, playas rocosas, zonas de vegetación baja o laderas de islas al Sur o levemente al Norte de la Convergencia Antártica.

Pelágico y epipelágico (Hofmeyr 2014). Islas al sur o levemente al norte de la Convergencia Antártica (Jefferson et al. 1993). Cuando se encuentra en tierra utiliza diferentes hábitats como praderas de hierba plana cercanas a las playas, playas rocosas abiertas y laderas con pendientes (Goldsworthy 2008). Ocasionalmente los machos y subadultos se encuentran en el continente Antártico y en campos de hielo durante el invierno (Jefferson et al. 1993).

Puesto que no se observan hembras durante el invierno, se cree que migran, pero no hay información hacia dónde lo hacen, probablemente al Norte.

No aplica.

Distribución de Provincias en Chile

Distribución de Territorios Especiales en Chile

Áreas Protegidas donde la Especie ha sido Reportada

Introducción

Caza comercial de focas llevó a esta especie al borde de la extinción de finales del siglo XIX. Ahora se cree que esta especie sobrevivió a este período de la sobrexplotación en un número muy reducido en tres puntos: (Hofmeyr et al. 2005, Wynen et al. 2000). Georgias del Sur, y el Bouvetøya Îles Kerguelen. La especie probablemente ha perdido una considerable diversidad genética debido al cuello de botella poblacional histórico (Wynen et al. 2000) y ahora puede estar en mayor riesgo de brotes de enfermedades y el cambio ambiental.

Pocas aguas habitadas por lobos finos antárticos son explotadas por la pesca, pero estas actividades pueden ampliarse en el futuro (Hanchet et al. 2003). Esta especie se ha registrado enredada en los desechos marinos, tales como línea de pesca, redes, grupos de embalaje y otros objetos. El número de lobos finos antárticos enredados en desechos antropogénicos anual se ha estimado tan alto como 1% de la población total. La mayoría de los animales enredados son juveniles y subadultos. En aproximadamente el 30% de los casos registrados, los restos causan perjuicio. Más animales se espera que mueran como consecuencia de su enredo (Bonner & McCann 1982, Croxall et al. 1990).

Las focas leopardo se ha observado que se pueden capturar hasta un tercio de los cachorros nacidos en los sitios en las Islas Shetland del Sur (Hiruki et al. 1999). Esos niveles de depredación pueden  ser suficientes para causar una disminución de la población en este sitio (Boveng et al. 1998).

El riesgo de transmisión de enfermedades de lobos finos antárticos a otros animales terrestres, tales como morbillivirus de pinnípedos, se desconoce. Los lobos finos antárticos son considerados como uno de los pinnípedos de alto riesgo de brotes de enfermedad en el futuro debido a su población en rápido crecimiento, la tendencia de los animales a congregarse en grandes agregaciones densas, y el efecto de los cambios ambientales asociados con el calentamiento global sobre la propagación de enfermedades (Lavigne & Schmitz, 1990). Turismo se lleva a cabo en varios lugares, pero debido al aislamiento de los sitios en que salen a descansar, las visitas de los turistas son raras (Kirkwood et al. 2003)

El efecto del cambio climático global sobre los lobos finos antárticos se desconoce, pero se ha sugerido que el calentamiento puede resultar en disminución de la población (Forcada et al. 2005, Learmonth et al. 2006).

Captura incidental y dirigida, cambio climático, enfermedades y contaminación (plásticos y minería).

Caza. En el pasado eran utilizados su piel y aceite.