Es de tamaño grande y robusto (longitud hocico-cloaca = 108 ±16) y la cola alcanza una vez y media la longitud del cuerpo. La cabeza es triangular, más larga en las hembras, hocico aguzado y cuello plegado lateralmente. Las extremidades posteriores son largas y robustas (Donoso-Barros 1966, Demangel 2016). Las escamas dorsales son granulares y lisas, tornándose cuadrangulares y quilladas hacia la región caudal. Las escamas ventrales triplican en tamaño a las dorsales, aunque el tamaño es menor en la zona gular. Puede presentar entre 140 y 168 escamas alrededor del cuerpo, con mayor cantidad en machos que en hembras (Ortiz 1980). Es de coloración grisácea con tintes olivas, verde petróleo y/o pardos oscuros. Posee notorias bandas negras en los costados del cuerpo y algunas manchas negras esparcidas, las que suelen concentrarse sobre las extremidades, cola y parte posterior del dorso, en ocasiones formando bandas dorsolaterales (Demangel 2016). El vientre es pálido con tintes azulinos, con tonalidades más claras en la zona cloacal y cara inferior de extremidades (Donoso-Barros 1966). Es más grisácea y más oscura en el pecho. Presenta estrías negras en la zona gular. Existen ejemplares melánicos que poseen la mitad anterior del cuerpo y la cabeza de un intenso color negro o café negruzco, salpicado de pequeños puntos amarillos, mientras que la mitad posterior es amarilla, variando a verdoso en la cola y extremidades (Demangel 2016).
Nota taxonómica:
Inicialmente Donoso-Barros (1966) describe este taxón como una subespecie de Tropidurus peruvianus, con terra typica en Caldera, Región de Atacama. Posteriormente Ortiz (1980) hace una revisión del género y su presencia en Chile, y la eleva a categoría de especie, incluyendo dentro de T. atacamensis las poblaciones del Islote Santa María, las que fueron mencionadas por Donoso-Barros (1966) como Tropidurus peruvianus marianus.
Frost (1992), realiza un análisis filogenético del género Tropidurus, reviviendo el género Microlophus y asignándolo a las especies de Tropidurus de la vertiente occidental de la cordillera de los Andes. Benavides et al. (2007) realizan un estudio filogenético molecular y establecen que Microlophus atacamensis corresponde a las poblaciones que se distribuyen en el sector costero al sur del río Loa. Desde entonces existe consenso sobre la identidad de este taxón y se han documentado algunas poblaciones nuevas (Demangel 2016) |